El amor y la bondad en ocasiones pueden salvar la vida de alguien. Lo mismo ocurre con los animales, especialmente con las criaturas heridas o abandonadas… El amor y la bondad en ocasiones pueden salvar la vida de alguien. Lo mismo ocurre con los animales, especialmente con las criaturas heridas o abandonadas. Al igual que estos animales, las personas piden ayuda cuando la necesitan. Tienen la audacia de contactar con quienes pueden ayudarles. Crean un final feliz por sí solos. La siguiente historia sobre un perro discapacitado que recorre kilómetros en busca de ayuda le hará sonreír. Para saber qué viene después, ¡desplácese hacia abajo!
La tripulación evaluó inmediatamente el estado de Poppy. La columna vertebral de la desafortunada perra se había fracturado y ahora estaba paralizada, por lo que era obvio que había tenido un accidente. Después de lavar y alimentar al animal herido, la llevaron rápidamente a la clínica. Sin embargo, no hubo buenas noticias para ellos. Durante un chequeo, se descubrió que Poppy tenía solo siete meses. La pequeña cachorrita se beneficiaría de la cirugía, pero tenía pocas o ninguna posibilidad de sobrevivir.
Por otro lado, los investigadores mantuvieron su optimismo. Reconocieron la distinción de Poppy. A pesar de no poder arriesgarse a una cirugía, Poppy comenzó terapia y actividades de rehabilitación para ayudar a fortalecer sus piernas. Simultáneamente, los voluntarios hicieron un gran esfuerzo para generar dinero para los gastos médicos y la atención médica continua de Poppy. Los amantes de los animales de todo el mundo aprovecharon la oportunidad para ayudarlos a salvar la vida de Poppy después de que humildemente pidieron ayud. Aunque Poppy todavía está demasiado enferma para someterse a una cirugía, no parece sentir ningún dolor. Poppy quedó encantada cuando recibió su propio juego de ruedas para correr. Después de innumerables horas de fisioterapia, el valiente cachorro finalmente ganó fuerza y ahora puede pararse a cuatro patas.