Con lágrimas en los ojos, fuimos testigos de cómo tiraban a la basura a un perro flaco y enfermo.
Pero justo cuando pensábamos que toda esperanza estaba perdida, apareció un ángel de la guarda y le dio a este pobre perro la oportunidad de una nueva vida.
Cuando finalmente rescataron a este joven, estaba tan enfermo que apenas parecía un perro. Decir que era piel y huesos es quedarse corto.
Estaba tan demacrado y anémico que levantarse le resultó demasiado difícil.
Estaba más que exhausta y mantener los ojos abiertos era casi imposible.
Salvar la vida de este perro sería otra cosa, pero sus rescatistas no se daban por vencidos con él.
El personal veterinario proporcionó al perro alimentos por vía intravenosa y transfusiones de nutrientes.
Su cuerpo carecía de nutrientes clave y de hierro.
Su salvador entendió que su salud estaba lejos de ser estable y permaneció a su lado por precaución.
Tenía problemas para mantenerse abrigado sin grasa corporal, por lo que su cuidador lo envolvió en un abrigo abrigado. Estaba feliz y finalmente se estaba recuperando.
Es sorprendente lo que un poco de cariño y amor puede hacer por un perro que siempre ha estado dispuesto.
Con el paso del tiempo su salud empezó a mejorar.
Es un proceso gradual, ¡pero cada paso adelante es un paso en el camino correcto! Ahora tiene energía para caminar e investigar. También hace nuevos amigos.
¡A Teddy le encanta su nuevo hogar de acogida!
Aproximadamente un mes después, su pelaje comenzó a recuperarse. Está empezando a parecer un cachorro sano. Incluso juega y mueve la cola.
¡Pero lo mejor es que está muy feliz! Su salvador ha decidido adoptarlo y darle todo el amor que pueda necesitar.
El cachorro adopta su juguete favorito, un osito de peluche, y lo carga felizmente mientras mueve su preciosa cola. Todos los que lo visitan quedan impresionados con su mejora.
¡Pasó de ser un esqueleto viviente a un cachorro feliz y saludable en solo cuatro semanas!
El tratamiento médico adecuado es complicado, pero nunca es fácil de encontrar, especialmente para las personas que constituyen la mayoría de las comunidades pobres.
¡Estamos muy contentos de que este cachorro se haya salvado a tiempo y, lo más importante, ahora está completamente sano y tiene una gran vida con sus nuevos dueños! ¡Sí, fue adoptado! ¡Qué final tan feliz!