Todos los días, Fronky, un Bull Mastiff, realiza el mismo ritual. Todas las mañanas, el perro se para en la puerta y le ruega a su madre que lo deje salir. Una vez en el patio delantero, se sienta y espera.
¡Fronky continúa esperando a su amigo más grande, una cartera llamada Shaun!
“Creo que el simple hecho de tener esta breve destrucción con Fronky la está ayudando y le da algo en qué esperar”, destacó Eileen.
Shaun y Fronky son sin duda grandes amigos. Shaun le pagará constantemente a Fronky un pase para sus días libres.
“Shaun se ha convertido en una especie de miembro de nuestra familia”, destacó Eileen. “Ella constantemente se olvida de regresar, y no podemos esperar para verla día a día… Y Fronky está completamente fuera de control cuando escucha su voz”.
El afecto de Fronky por Shaun es inusual para su raza, según Hill’s Pets. Según la página web de Internet:
“Con los miembros de la familia, los Bullmastiffs son amables y cariñosos”. Sus personalidades generalmente tranquilas y tranquilas los llevan a ser más amigables con familias con niños que se portan bien.